La importancia del contacto piel con piel con el bebé
Realizar contacto piel con piel con el bebé tras el nacimiento, es de suma importancia, ya que tiene múltiples beneficios tanto para la madre como para el bebé. Todos los bebés, independientemente del tipo de parto por el que hayan nacido, ya sea vaginal o por cesárea, deberían iniciar el contacto piel con piel tras el nacimiento. Solo está contraindicado en los casos en los que exista alguna complicación materna o neonatal que impida que se realice.
¿Qué es el piel con piel con a los bebés?
El piel con piel se define como una técnica que consiste en colocar al recién nacido en contacto con la piel de su madre tras el nacimiento. Para que sea efectivo, el contacto debe de ser directo con la piel, sin que haya ningún elemento que interfiera. Se recomienda que el contacto sea ininterrumpido durante al menos dos horas.
Existe muchísima evidencia que ha demostrado que la práctica del contacto piel con piel tras el nacimiento tiene múltiples beneficios tanto para la madre como para el bebé.
Organismos como UNICEF, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Española de Pediatría (AEP), entre otras, recomiendan que se realice esta práctica tras el nacimiento, siempre que no haya ninguna contraindicación y sea seguro, tanto para la madre como para el bebé.
Cómo hacer el piel con piel con el recién nacido
Realizar el piel con piel en el recién nacido es muy fácil, pero es importante tener en cuenta algunos aspectos para que tanto la madre, como el bebé, se puedan beneficiar de esta práctica.
Una vez el bebé ha nacido, se le colocará inmediatamente sobre la piel de la madre, es importante que el bebé esté en contacto con la mayor superficie del pecho y el abdomen.
El contacto debe de ser directamente con la piel, esto significa que no debe de haber toallas, ropa o sábanas que interfieran en el contacto.
Los cuidados iniciales de recién nacido pueden esperar, y si se necesita realizar algún control, estos deberían realizarse encima de la madre siempre que fuera posible.
Si existe alguna complicación, tanto materna como neonatal, el bebé podría iniciar el contacto piel con piel con el padre, un familiar, o si fuera posible, con el personal sanitario.
En los casos más graves, en los que el bebé necesitara ser admitido en una unidad neonatal, el contacto piel con piel se podría iniciar una vez el bebé estuviera estabilizado y fuera seguro.
Cómo hacer el piel con piel con un bebé prematuro
Los bebés prematuros también pueden beneficiarse del piel con piel a través del método canguro. La técnica sería la misma que con un bebé nacido a término, pero cambiando de posición.
La posición recomendada se llama la posición canguro, que consiste poner al bebé en posición vertical sobre el pecho desnudo de la madre, padre o personal sanitario. Es importante poner la cabeza de lado, el oído cerca del corazón y mantener los brazos y piernas flexionadas.
La posición canguro o método canguro, más comúnmente nombrado, se puede realizar hasta que el bebé es capaz de mantener la temperatura por sí solo, normalmente hasta la semana 38.
El método canguro es una alternativa a la incubadora y además, se ha comprobado, que reduce el riesgo de padecer enfermedades graves y frecuentes en bebés prematuros, como por ejemplo, la gastroenteritis y la enterocolitis necrotizante.
Beneficios del piel con piel en bebés
Para los bebés, realizar contacto piel con piel tras el nacimiento tiene múltiples beneficios. Algunos de estos son:
- Favorece el agarre espontaneo ya que el bebé se encuentra en un estado de alerta. Esto ayuda a establecer una lactancia materna exitosa.
- Disminuye el estrés producido por el parto en el bebé, gracias a que ayuda a que disminuya el cortisol.
- Disminuye la irritabilidad y el llanto en el recién nacido.
- Regulación de la frecuencia cardíaca y la respiración, lo que le ayudará a adaptarse mejor a la vida extrauterina.
- Ayuda a que el bebé mantenga su temperatura en rangos normales.
- Estimula el proceso de digestión y el interés por comer.
- Previene la hipoglucemia (bajada de azúcar).
- Fortalece su sistema inmunitario proporcionándole defensas que le ayudarán a protegerles de infecciones.
- Mejora las habilidades cognitivas y aumenta el desarrollo físico.
- Fomenta apego seguro (1) en el bebé y el vínculo materno.
- Ayuda a reducir la estancia en el hospital.
Beneficios del piel con piel en las madres
No solo el contacto piel con piel beneficia a los bebés, sino que también tiene múltiples beneficios para la madre. Entre ellos podemos encontrar:
- Reduce el dolor del postparto inmediato.
- Ayuda a que el útero se contraiga y previene la hemorragia postparto.
- Disminuye el riesgo de padecer depresión postparto.
- Fomenta la lactancia materna (2) favoreciendo un buen agarre y succión.
- Ayuda a establecer un vínculo temprano.
- En los partos por cesárea, ayuda a reducir el miedo y el estrés causado por la cirugía.
Esperamos que a través de este blog hayáis entendido en que consiste realizar piel con piel en el bebé, cómo se hace, y cuáles son los beneficios tanto para la madre como para el bebé.